miércoles, 14 de octubre de 2009

ES SÓLO ROCK AND ROLL...

Rogelio vivía un sueño constante. Se levantaba todas la mañanas del lado izquierdo de su cama y siempre lo despertaba el Himno Nacional y la gastada sensación de su boca reseca, pero esa mañana se había encontrado en una posición diferente y los primeros rayos de día lo descubrieron en su mesa, sentado, hojeando un libro y mirando un álbum con fotografías. Observó fotografías de "no hace mucho tiempo" , en donde aparecía en un concierto de The Cure ataviado con el atuendo clásico, lipstick rojo corrido, sombras y pintura sobre su cara chorreada de sudor y una cerveza en su mano. Pensaba en qué tan lejos estaba de eso ahora...
*****
Sonia preparaba los almuerzos de sus dos niñas y ponía unos característicos snacks en sus mochilas mientras su marido sacaba la RCV de la cochera. Apresurándolas, como todas las mañanas, Liza, las más pequeña, le señalaba que en MTV anoche habían pasado un video del grupo que le fascinaba a su mamá y que era el de la canción de "Hey...Hey..Hey... yes I Like it a lot...." que le cantaba cuando estaban contentas...Sonia pensó que esa canción era fabulosa y que lo era más estar en ello"unos cuantos años después"... Ella sonrió y pensó en qué tan lejos estaba de eso ahora
****
Esteban no llegaba a los cuarenta y tenía un hijo de diecisiete, quien heredó su habilidad musical. Unos años antes, Estebancito (o Junior) se interesó por tocar la guitarra y ni tardo ni perezoso le enseñó la Teoria de las Pentatóniocas y algunas armonías jazzeras y bluseras. Le enseñó a usar el distor, pero sobre todo el Delay, como The Edge... mira, Junior.... tarataratá..taa..ta..t... ¿Escuchas? esa es Where the streets have no name... y cuando tenía tu edad fui a ver al Cine Diana Rattle and Hum de U2... eso marcó mi vida... Obviamente pensó que las diferencias musicales eran cíclicas y recordó las peleas con su padre quien siempre decía que The Cure y U2 eran una bola de fascinerosos, lo mismo que pensaba de los grupos que Junior escuchaba... El sonrió y pensó en qué tan lejos estaba eso de ahora
***
Feliciano vendía tomates en el mercado de Revolución junto con su mamá. Un día, te voy a comprar el puesto de huevo que pronto, muy pronto va a dejar Doña Cornelia pa que lo manejes mijo.... No, mamá... lo mío es el rock... voy a ser famosos y te voy a comprar una casota en Cuernavaca con estos acordes y estas rolitas.....Poca gente se acuerda de Feliciano. Llego a ser un buen guitarrista en los años en que el Rock en Español surguía con fuerza a prinicipios de los noventas. Con su banda "Pistolas Calientes" tuvo dos que tres éxitos en la radio local y tenían su grupo de seguidores. Se enamoró de Carmela, la hija de Don Manuel el de las carnes frías... ¿Cuál es el colmo del guitarrista de las "Pistolas Calientes"? Que sea novio de la hija del de las carnes frías...jajajajja. Unos cuantos años más tarde, Carmela le daba una niña morenita, morenita y dejó la guitarra para cargar cajas, aprender el negocio de los Ultramarinos y esperar la herencia y dar el braguetazo. De vez en cuando, le pone canciones de rock a Carmencita y ella baila y toca su guitarra, ahora le está enseñando Puente de Cerati. Su mamá es la Reina del Tomate
**
Entraba la sustancia al cuerpo por la Arteria Radial y sus pupilas se dilataron. Recordó el último concierto que tocó. El último acorde retumbó en el auditorio y en su mente. Después fueron días de desperdicio. De desgaste y de desbaste. Ahora, su respiración se detenía mientras se recostaba a lo ancho de la cama. Un temblor le indicaba que el viaje de nuevo había iniciado. Pudo ver el color del Do. La temática aflorada de Ré. Lo impasible y cálido del Mi. Lo engreído del Fa. El toque esperanzador de Sol. Lo básico y central de La. Lo indefinido del Si. Lo exótico e impredescible de los sostenidos y bemoles. Lo oscuro del agujero profundo en el que iba cayendo. Pensó en La Divina Comedia... Dejad toda esperanza al que entre por esta puerta... Un cenote! como los de Yucatán... se vio flotando como siempre, pero luego caía al vacío y mientras lo hacía un sólo de Van Halen sonaba como un alarido. Murió observando las figuras de polvo en el techo.
*
La última noche compuso La Oda a las canciones estériles. Cuando la terminó regresó a la cama y se acurrucó a ese cuerpo tan conocido. Mientras lo abrazaba descubrió que dejaría nuevamente todo por estar con ella, pero había algo que no dejaba de rondar por su vida y era esa necesidad de expresar con música su entorno. Canciones estériles que jamás nadie iba a escuchar pero era le resultado de esa andar y nadar sobre aguas turbulentas y tibias. Mientras pensaba en ello, Ella volteaba para ponerse de frente y todo se olvidaba.... en esa noche, Ella concibió a la pequeña Paty (com Paty Smith). Años después, le decía: El día que escribí La Oda a las canciones estériles, se embarazó tu mamá de tí... Qué locochón....

Eso es Rock and Roll

1 comentario:

Victoria dijo...

que nunca se arrepienta de haber dejado la musica por ese momento... nunca, el tener la oportunidad de ser padre es lo mejor que puede pasarle a cualquier musico, poeta o loco...