domingo, 27 de julio de 2008

PASEO POR CALLE AMARGURA





"El Hombre no es gran cosa junto a las grandes aves y las fieras. Con todo, preferiría ser esa bestia que está allá abajo en las tinieblas del mar".
Ernest Hemingway. "El Viejo y El Mar"




-¿Qué sientes?


- Siento... frío.


El avión, bamboleándose con cadencia imitando el ritmo de un son cubano, aterrizaba en el aeropuerto de La Habana. Ella sentía un mareo normal, digamos, pero era el miedo de comenzar una nueva aventura. Otra vez. Pero esta vez iba en el papel de olvidar todo y dejar que la suerte dictara el rumbo de la situación. Al bajar por la escalinata, un olor a lluvia citadina le distraía de su abstracción. Por fin Cuba. Sería la misma Cuba que sus amigas le platicaban en el café.


- Será nice que vayas a la Isla y te aconchabes a un negro... si vieras lo que hacen para tí...


- Hotel Nacional. El mejor..


- La Habana de Hemingway. Mi Daiquirí... en el Floridita.


-Visita...


- Come...


- Ayuda a los pobres de...


- Lleva medias...


- La Bodeguita del Medio


- Sí. Sí. Sí. Ya lo verás


Aduana. Filtros. Revisiones. Calle. Muchas maletas y todas las amigas se sentían los tuertos en la tierra de los ciegos. Olvidar había sido la misión.Pero como olvidar algo ya olvidado. Algo que estaba perdido desde hace mucho y de lo que ya no se acordaba como de aquellas sombras que veía desde su escritorio cuando trabajaba hasta tarde y que la sorprendían y el miedo la estremecía y un frío recorría su columna.


- Siento frío...

- ¡Al fin, Cuba!


Pero en realidad no deseaba estar ahi. Había buscado una salida final a un problema simple y sencillo. Y es que el desamor a esas altura de su vida era como curar una herida superficial que se volvía a abrir cada tres años. Esa sensación de desgaste y de vacío la había acompañado gran parte de su vida (al menos en la adulta). En realidad no le llamaba la atención ver las calles grises y agridulces de La Habana con olor a viejo recuerdo. Entre lo borroso de la gloria que había tenido en la década de los cincuentas y las paredes rayadas con leyendas marxistas.

"PATRIA Ó MUERTE"- leía. - ¡Qué perredistas y qué ocho cuartos!- reía mientras enfocaba la cámara. -¡Qué señal, qué amenaza!. "EL CHE Y FILIBERTO NO HAN MUERTO"- mientras el mundo es invadido por noticias de la gente que se muere ahogada al cruzar en balsas o llantas ese pequeño espacio entre para llegar a Florida, mi sangre. En La Habana todo parece una fotografía tratando de copiar los mejores años de ella pero el Club Social Buena Vista ya no da más danzones y ya no pasa el tranvía por el Crucero de la Playa. Ahora entiendo la soledad de Hemingway en el Hotel Ambos Mundos cuando escribió "Por quién doblan las campanas.." al evocar desde cada rincón de su habitación los campos verdes españoles, la triste pólvora de la guerra, el amor de lo hispano y el calor que se mitiga con ron. Un mojito por el camarada Hemingway. Vamos pa' Cojimar, mi hermano.



-¿ A dónde quieres ir, mi vida? Hace mucho que no viajamos juntos...
- A Cuba.



La Treo resaltaba en sus manos con el sol de fondo y el anillo de diamantes que se había comprado para la desolada ocasión de abandono reflejaba una luz triste, muy inusual. El mensaje lo decía claro. "Eres un trozo de amanecer, de esos que sirven para aderezar las mañanas con un manojo de brisa, de ése que se extrae de tu sonrisa...Es la mujer por la que el sol sale todos los dias,el calentamiento global lo usa solo de pretexto... Cuando camines por la calle Amargura me verás por ahi en contra esquina con Desencuentro." Qué diferente era ese mensaje al que, con mucha ágilidad verbal, por primera vez, le tocaba el corazón : Luz de mi raciocinio. Sinceramente, no evitó que la lágrima que asomaba por su ojo izquierdo resbalara y la secara el viento salado.



La llamada telefónica fue tenaz. Fue soberbia. Disculpe, ¿se encontrará X?. No pero dígame. Habla su Esposa ¿Esposa? X no es casado. X es casado y yo soy su esposa. Disculpe, señora pero X me ha mentido. Me ha mentido y me ha enamorado y yo he investigado este teléfono en la lista de números. Viene su nombre ahi. X. X. Sí efectívamente es X pero es mi casa y yo soy su esposa y X como siempre anda de viaje. Pues X vino a verme y me propuso irme con Él. Le marcaba para decir Si y darle la sopresa. X. X. X nos ha engañado. X es un maldito. X nos ha roto el corazón. ¿Roto? a mí no me lo ha roto. Más bien me ha desilusionado porque no es lo que yo pensaba. Llevo meses sintiendo eso, pero Usted. Llamó para decirle que se iba con Él. X. X. La verdad siento feo. Si. Necesitamos vernos. No mencione nada. X llega el fin de semana. X estará en su oficina. X verá lo que es la fuerza de las mujeres. X es así. Es un crápula. Si, es el crápula del amor. Le daremos una lección que jamás olvidará. Oiga, ¿Y usted quiere a X? No. Lo odio. Lo odio porque me rompió la ilusión de tener una familia. X. X. Siempre el maldito X. Y ¿X usó protección? Sólo para no enamorarse. Mañana iremos a una prueba de sangre. Maldito. Maldito X. Y si X tuviese más mujeres... No lo dude señora, no lo dude....



Una sonrisa se asomaba por sus dientes. X, ya te habrá llamado el abogado para decirte lo que quiero. He sacado una orden de restricción. No te puedes acercar a mí hasta el día que firmes los documentos en el juzgado. ¿Has visto como el fuego renueva las cosas? De tu ropa salieron mil demonios, X. El fuego calentó e iluminó mi vista. Me reí y lloré por tí y por mí. Te odio. Enfermo. ¿El viaje? Lo haré a mi manera. Olvídame. Adios a la música. Adios al dolor. X. Eres de lo peor X. Checa tu correo.



¿Cómo olvidar todo desde esta latitud? Ella caminaba por la calle Amargura y pasaba a un costado del Hotel Raquel. Una pregunta le venía a la mente. ¿Por qué La Habana? Pudo haber sido Acayucan ó Pénjamo. La Habana tan triste y sola. La gente reía y cantaba: "Tú me recuerdas las calles de La Habana Vieja...". "Te doy una canción y digo Patria, y sigo hablando para tí..." Se sentía tan ajena a ese mundo, tan triste que decidía pagar sus errores con viajes. Cuba, primero. Puerto Rico y Dominicana después. - Llegaré a Jamaica cuando sea feliz.- La sombra de la pena negra. La rumba sin son. El miedo a sufrir el dolor de ya no sufrir. El blues de la liberación y su incongruencia antiyanqui. Fidel enfermó y Raúl tomando el pseudocontrol. Y todavía la hacen de tos contra México. Vendidos. Baratos. Inócuos. (¿Inócuos?) ¡Qué locura!. Miami, mi Mami. Miami puede ser una mejor opción. ¡Y aquí no hay Malls!. Viajar. ¿Río?. Muy bien. Es más lindo ser Luz del Raciocinio que desencontrase con alguien. ¿Por qué no puedo comer buenos camarones aquí? Como México no hay dos, ni como (Ha)Guaymas.



Libertad. Presa pero en Libertad. Todo había acabado. Veía el letrero de la Calle Amargura y pensaba que ya podía decir que había andado por allí. Una risa le iluminaba la cara y sus amigas caminaban rumbo a La Bodeguita. Las luces de la calle se encendían una a una en esa hora donde la tarde desaparece y la noche sale. El mar rodeaba todo.Y muchas fotos y mucho paseo. Mucho Son de La Habana sin expedientes y sin presión. Libre pero presa como el mar en el Malecón. Martí se revolcaba en su tumba viendo lo que la Revolución hacía con su sueño y la gente pisaba los parques y el agua mojaba sus calles.






1 comentario:

Victoria dijo...

Luis
Hay un dicho (cubano) que dice: PERRO HUEVERO AUNQUE LE QUEMEN EL HOCICO. Suena feo pero es la neta, yo lo diria muy suavemente... Vez? eso te pasa por lo que haces... no rompas mas corazones en la vida que el que a hierro mata a hierro muere... Adios a tu Habana, al menos con ella... La Habana que existe hoy a lo mejor no te resulta tan atractiva como aquella jodida que querias ver porque es cierto GAD en manos de Raul Castro la cosa se esta poniendo mejor. Quien dijo que ser anti-yankie era una buena idea.. los gringos seran estupidos pero como quiera dominan el mundo.. no te resistas tanto.. QUIERES IR A CUBA????